Cómo prepararte antes de tu cita
Es probable que comiences por consultar a tu médico de cabecera o a un médico general. Sin embargo, en algunos casos, cuando llamas para programar una consulta, puedes ser derivado inmediatamente a un neurólogo.
Es conveniente que te prepares para tu consulta. La siguiente información te ayudará a prepararte.
Qué puedes hacer
- Anota todos los síntomas que experimentas. Asegúrate de incluir los que parezcan no tener relación con el motivo de tu consulta.
- Anota tu información personal más importante. ¿Has tenido alguna situación de estrés importante, o cambios en tu vida recientemente? Compartir este tipo de información puede ayudar a tu médico a elaborar un diagnóstico.
- Haz una lista de todos los medicamentos. Incluye las dosis de cualquier medicamento que tomes, y no olvides anotar cualquier vitamina o suplemento que tomes también.
- Si es posible, pídele a un familiar o a un amigo que te acompañe. En ocasiones, puede ser difícil recordar toda la información durante una consulta. La persona que te acompañe puede recordar algún detalle que hayas pasado por alto u olvidado.
- Anota preguntas para hacerle a tu médico.
Preparar una lista de preguntas te ayudará a aprovechar al máximo tu tiempo con el médico. En el caso de la parálisis de Bell, estas son algunas preguntas básicas para hacerle al médico:
- ¿Cuál es la causa más probable de mis síntomas?
- ¿Existen otras causas posibles de mis síntomas?
- ¿Qué tipo de pruebas necesito hacerme?
- ¿Esta enfermedad suele ser temporal o de larga duración?
- ¿Qué tratamientos hay disponibles para tratar la parálisis de Bell? ¿Cuál me recomiendas?
- ¿Existen alternativas al enfoque principal que sugieres?
- Tengo otros problemas de salud. ¿Cómo puedo controlar mejor estas afecciones de manera conjunta?
- ¿Hay algún folleto u otro material impreso que pueda llevarme? ¿Qué sitios web recomiendas?
No dudes en hacer preguntas adicionales que se te ocurran durante tu consulta.
Qué esperar del médico
Debes estar dispuesto a responder preguntas de tu médico, tales como:
- ¿Cuándo comenzaste a tener los síntomas?
- ¿Los síntomas han sido continuos u ocasionales?
- ¿Cuán intensos son los síntomas?
- ¿Existe algo que, al parecer, esté mejorando los síntomas?
- ¿Existe algo que, al parecer, esté empeorando los síntomas?
- ¿Alguno de tus parientes alguna vez padeció parálisis de Bell o problemas de parálisis facial?
- ¿Has tenido algunos síntomas de una infección más generalizada?
Qué puedes hacer mientras tanto
Si tienes dolor facial:
- Toma analgésicos de venta libre. La aspirina®, el ibuprofeno o el paracetamol pueden aliviar el dolor.
- Aplica calor húmedo. Colocar un paño humedecido con agua tibia en la cara varias veces al día puede ayudar a aliviar el dolor.
Si tu ojo no se cierra del todo, intenta estas sugerencias:
- Usa tu dedo para cerrar tu ojo repetidas veces durante el día.
- Usa gotas lubricantes para los ojos.
- Durante el día, usa anteojos para proteger tu ojo.
- Usa un parche en el ojo a la noche.
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Contenido: Mayo Clinic.